David S. Wisener

David S. Wisener

David S. Wisener es el pastor fundador de la Iglesia Metodista Libre Redentor en High Springs, Florida, y autor de “Perdimos la trama: encontrando nuestra historia en un mundo confuso” del cual se adapta este artículo. Es bivocacional y también trabaja como gerente de desarrollo económico de la ciudad de Alachua, Florida. Vive en Alachua con su hija adolescente, Naomi. Ha pasado la mayor parte de su vida dentro de la Iglesia Metodista Unida, pero recientemente se sintió atraído por la Iglesia Metodista Libre. Es egresado de la Universidad de Florida con una licenciatura en ciencias políticas y actualmente está cursando una maestría en el Seminario Teológico de Asbury.

Por David S. Wisener 

“Den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús” (1 Tesalonicenses 5:18).

“Dando siempre gracias a Dios el Padre por todo, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo” (Efesios 5:20).

“Hermanos míos, considérense muy dichosos cuando tengan que enfrentarse con diversas pruebas, pues ya saben que la prueba de su fe produce perseverancia” (Santiago 1:2-3).

“Yo, en cambio, te ofreceré sacrificios y cánticos de gratitud. Cumpliré las promesas que te hice. ¡La salvación viene del Señor!” (Jonás 2:9).

Psicológicamente hablando, lo que percibimos como real es, para nuestra mente, real. Es lamentable que creamos que podemos caminar entre el tráfico sin que nos atropelle un coche, pero ahí es donde la realidad real puede confrontar incómodamente nuestra realidad mental, a veces equivocada.

_

«I’ve been told on good authority that one of my stumbling blocks is a belief deep within my heart that God isn’t actually good.»

_

Estoy en un punto de mi fe cristiana en el que puedo identificarme con la oración clásica de San Agustín en su “Confesiones”: “Nuestros corazones están inquietos, oh Dios, hasta que encuentren descanso en Ti”. He estado dando vueltas allí por un tiempo, tratando de encontrar este descanso.

Me han dicho de buena fuente que uno de mis obstáculos es la creencia en lo más profundo de mi corazón de que Dios no es en realidad bueno. Y supuestamente cuando reciba más evidencia de Su bondad en mi vida, podré aceptar esto a un nivel más profundo.

La cuestión es que creo que la evidencia ha estado ahí todo el tiempo, pero solo no encaja en mi corazón. Simplemente no soy muy agradecido. No estoy seguro de por qué.

Supongo que una buena pregunta es: ¿Debería ser agradecido? De hecho, creo que debería serlo. Pero no lo soy. He hecho eso de hacer una lista de todas las cosas por las que deberías ser agradecido en la vida, y es una experiencia humillante que resalta las muchas cosas que tiendo a sacar de mi mente consciente y dar por sentado. Pero eso no ha cambiado mi actitud.

A Bertrand Russell, un filósofo inglés que escribió mucho sobre su ateísmo, una vez le preguntaron qué le diría a Dios al morir si se descubriera que Él es real. Como se cita en “An Introduction to the Philosophy of Religion [Introducción a la filosofía de la religión]” por Michael J. Murray y Michael C. Rea, dijo que respondería: “¡No hay pruebas suficientes, Dios! ¡No hay pruebas suficientes!

_

«Cuánta sería suficiente?»

_

Lo que plantea la misma pregunta con respecto a mi agradecimiento: ¿cuánta sería suficiente? Podemos tener una idea en nuestra mente de lo que sería eso, pero si somos propensos a la incredulidad, es probable que, con el tiempo, empujemos más allá la línea que define lo suficiente una vez que la hayamos cruzado.

Entonces, sobre el agradecimiento y mi percepción. El pensamiento incómodo que tengo es… tal vez es hora de que simplemente lo elija. Quizás cuando suceda algo bueno, por pequeño que sea, debería obligarme a expresar gratitud a Dios. Aunque piense que es una estupidez. Aunque no quiera.

Y creo que todavía puedo permitirme quejarme cuando suceden cosas malas. Sólo necesito equilibrarlo con la atención adecuada debido a las cosas buenas. Las cosas buenas que son tan fáciles de ignorar: despertar cada día, respirar otra vez, tener otro latido, ver a mi hija, sentir el sol en mi piel.

Quizás esa sea la manera de llevar mi mente a donde debería estar.

Este artículo es un extracto adaptado del nuevo libro “Lost the Plot: Finding Our Story in a Confusing World [Perdí la trama: encontrando nuestra historia en un mundo confuso]”. Haz clic aquí para pedir el libro en la librería Luz y Vida.

+

David S. Wisener

David S. Wisener

David S. Wisener es el pastor fundador de la Iglesia Metodista Libre Redentor en High Springs, Florida, y autor de “Perdimos la trama: encontrando nuestra historia en un mundo confuso” del cual se adapta este artículo. Es bivocacional y también trabaja como gerente de desarrollo económico de la ciudad de Alachua, Florida. Vive en Alachua con su hija adolescente, Naomi. Ha pasado la mayor parte de su vida dentro de la Iglesia Metodista Unida, pero recientemente se sintió atraído por la Iglesia Metodista Libre. Es egresado de la Universidad de Florida con una licenciatura en ciencias políticas y actualmente está cursando una maestría en el Seminario Teológico de Asbury.