La verdad, la justicia y el camino de la evangelización

Por Howard A. Snyder y John Carter Adams

(Nota del editor: Este artículo discute las dimensiones del evangelismo introducidas inicialmente en el artículo anterior de los autores, “El evangelismo y el Reino de Dios en la Tierra”. El equipo de Luz y Vida te anima a leer ese artículo antes de leer este).

El evangelismo cultural es el impacto global de la iglesia, comenzando en el contexto local y alcanzando todo el mundo. Significa moldear las sociedades y culturas del mundo a través de la verdad del reino de Dios.

Esto requiere que la iglesia involucre a la sociedad en todos sus sectores: las artes, la economía, la educación, la ciencia y la tecnología, la virtud y la moralidad, la filosofía y la visión del mundo. Esta dimensión de la evangelización llama a los cristianos de todos los sectores a dar un testimonio transcultural efectivo de la verdad del evangelio, tanto de palabra como de obra.

El evangelismo cultural puede tener muchas dimensiones, porque la cultura es muy compleja. Incluye testigos que involucran la mente y la imaginación de la sociedad (tanto su mundo de pensamiento como sus actos).

El principal fundador del metodismo fue el reverendo John Wesley, quien nació el 17 de junio de 1703 en Epworth, Lincolnshire, Inglaterra, y murió el 2 de marzo de 1791 en Londres. John y su hermano, Charles, fueron usados por Dios como los organizadores y chispas que crearon el movimiento metodista. ¿Cómo se involucraron estos metodistas con la cultura de su época? Entre otras cosas:

1. Fueron a donde estaba la gente, lo que resultó en que John Wesley se aventurara a predicar al aire libre.
2. Utilizaron las melodías musicales de la cultura, incluso adaptando canciones de bar para transmitir el mensaje del evangelio en canciones. Charles Wesley era un maestro en este tipo de compromisos.
3. Utilizaron la comunicación masiva para difundir el mensaje. La palabra hablada, los tratados, las canciones y los libros eran vías comunes para los hermanos Wesley.
4. Ya en 1730, los hermanos se involucraron en la cultura de otras maneras. Visitaron a los prisioneros de Oxford, les enseñaron a leer, les ayudaron a encontrar empleo y crearon un sistema para pagar las deudas. Facilitaron la vida de los indigentes y las personas empobrecidas mediante la distribución de alimentos, ropa y medicinas. Con el tiempo, los metodistas abrieron escuelas para que la gente pudiera aprender a leer.

Estos ejemplos de hace 300 años reformaron la cultura de Inglaterra. Este cambio histórico fue la base que más tarde cambió los corazones de la gente en Inglaterra y los Estados Unidos para prohibir y abolir la esclavitud.

Evangelismo de Justicia

La Iglesia Metodista Libre tiene un ministerio de justicia evangelístico llamado International Child Care Ministries (ICCM), o Ministerios Internacionales de Cuidado Infantil. La organización responde a la comisión de Jesús de cuidar de los niños pobres y huérfanos del mundo. ICCM proporciona educación, alimentos, ropa y atención médica básica a miles de niños en más de 40 países, cooperando con aproximadamente 100 escuelas que atienden a algunas de las zonas más pobres del mundo.

La organización asocia a personas compasivas con niños necesitados. Cada padrino realiza pagos regulares de manutención para brindarle a su niño o niña no solo un futuro más prometedor, sino también un presente más cómodo. Se intercambian cartas entre el padrino y el niño y, a menudo, se desarrollan relaciones personales, incluso familiares. Algunos padrinos incluso hacen el esfuerzo de visitar a sus niños.

La educación que ICCM proporciona a los niños de todo el mundo es un medio de vida y liberación. Muchos niños pasan por el programa y emergen como líderes en sus comunidades locales y nacionales. La atención amorosa que se les mostró cuando eran niños inspira su servicio a los demás. De hecho, varios de los coordinadores nacionales de la ICCM fueron alguna vez niños apadrinados.

El evangelismo de justicia no se aplica solo a los niños, ni siquiera a los seres humanos. Así como Adán fue puesto en el Jardín del Edén y se le encomendó la tarea de cuidarlo, por extensión, tenemos la responsabilidad de cuidar nuestro medio ambiente, y hay serias consecuencias por no hacerlo. De hecho, la salud del orden creado por los no humanos y la salud de las personas, especialmente de los pobres, están íntimamente conectadas.

En Jeremías 12:1, el profeta se queja a Dios: “Tú, Señor, eres justo; por eso quiero presentar mi caso ante ti. Sin embargo, quisiera discutir contigo sobre la justicia”. ¿Por qué prosperan los malvados?, pregunta él, y ¿Hasta cuándo estará de luto la tierra y marchita la hierba de todos los campos? Por la maldad de los que en ella habitan, han perecido los animales y las aves” (Jeremías 12:4a). Dios responde: “Han dejado en ruinas toda la tierra, y no hay nadie que se preocupe por ella” (Jeremías 12:11).

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«El evangelismo cultural es esencial si las sociedades van a ser transformadas para reflejar la realidad del reino de Dios».

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La tierra (como la humanidad) es a menudo víctima de la opresión. Eden: People+Planet (anteriormente conocido como Eden Reforestation Projects) es un excelente ejemplo de evangelismo de justicia en el mundo natural. En Madagascar se han plantado más de 10 millones de manglares. En Etiopía, Eden plantó tres bosques jóvenes y saludables, que han fomentado el crecimiento de la vida silvestre, han detenido las inundaciones y la erosión, han refrescado los manantiales y han mejorado la calidad del suelo local.

Reflejando la realidad

La Biblia presenta una imagen de la realidad (cosmovisión) y una narrativa (historia del mundo) que son claramente diferentes de todas las filosofías, mitos, religiones e ideologías del mundo. Las Escrituras revelan la verdad de Dios, demostrada supremamente en Jesucristo y en Su reinado, por lo que el evangelismo cultural es esencial si las sociedades van a ser transformadas para reflejar la realidad del reino de Dios.

Las dimensiones del evangelismo están, por supuesto, estrechamente entrelazadas. Juntos forman una sola imagen: la proclamación y la vivencia del reino de Dios tal como se revela en Jesucristo. La misión holística significa combinar las dimensiones del evangelismo dentro de cada iglesia local y en la iglesia a nivel mundial. En un artículo futuro de Luz + Vida, exploraremos dos dimensiones más del evangelismo: el evangelismo del discipulado y el evangelismo de conversión.

¿Cuál es tu vocación? ¿Cómo es tu evangelismo?

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