Liberación, sanidad interior y liberación de las personas

Por Jeff Finley

Los pastores de la Chapel of Change [Capilla del Cambio] , Brian y Laura Warth han experimentado regularmente la guerra espiritual, y ahora están ayudando a otros a encontrar la sanidad interior y la libertad de la opresión demoníaca.

En una conversación con Brett Heintzman en un episodio reciente de “El podcast Luz y Vida” la pareja compartió sobre su ministerio de liberación y lo que han encontrado mientras lideran una congregación metodista libre multi-sitio en rápido crecimiento en el Sureste de California.

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«… hay más de lo que se ve con el ojo natural». – Brian Warth

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“Mis primeros años de servicio al Señor estuve expuesto a diferentes formas de actividad demoníaca”, dijo Brian Warth. “Nuestra iglesia está presionando más para enseñar a nuestra congregación sobre la guerra espiritual e incluso las puertas demoníacas que se pueden abrir en sus vidas. Estamos viendo, creo que, porque estamos en este contexto urbano, que mucha gente sufre de fortalezas demoníacas en su vida… así que realmente estamos presionando desde el púlpito para enseñarle a la gente que hay más de lo que se ve con el ojo natural”.

Siguen el ejemplo de Jesús en Lucas 4.

“El comienza hablando de liberar a las personas, y creemos que el mismo poder que Jesús usó para liberar a las personas todavía está disponible a través del Espíritu Santo, y la iglesia debe ser un instrumento principal de ese poder”, dijo Brian. “Mucha gente está lidiando con estas fortalezas demoníacas en su vida y se preguntan por qué todavía están en cautiverio. Se preguntan por qué siguen tomando malas decisiones”.

Si bien algunos problemas no están relacionados con los demonios, los Warth creen que “las fuerzas de la oscuridad” están conectadas con la ruptura de individuos y familias. El avivamiento en la carpa de la Capilla del Cambio en octubre de 2022 incluyó un enfoque en la liberación.

Laura Warth dijo que no estaban buscando involucrarse en este tipo de ministerio, pero están siendo fieles a donde Dios los ha llevado.

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«El Señor abrió nuestros ojos para ver lo sobrenatural y tener experiencias con personas que estaban fuertemente atadas por espíritus demoníacos». – Laura Warth

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“Incluso desde el principio como iglesia, el Señor abrió nuestros ojos para ver lo sobrenatural y tener experiencias con personas que estaban fuertemente atadas por espíritus demoníacos, y comenzamos a buscar al Señor sobre eso y comenzamos a estudiar y a orar por la gente. Más intencionalmente en ese sentido”, dijo. “Comenzamos a ver personas liberadas. Comenzamos a ver personas liberadas del alcoholismo, la depresión, la vergüenza y la culpa a través de abortos y otras cosas que habían hecho voluntariamente o no (traumas, cosas que les sucedieron mientras crecían) y en realidad comenzamos a ver la mano de Dios moverse”.

Fortalezas

Brian dijo que existen diferentes definiciones de fortalezas, pero “definimos una fortaleza como una mentalidad poco saludable que generalmente se establece en la mente de las personas como resultado de caer en las mentiras o exageraciones de Satanás y sus diablillos”.

Agregó que la guerra espiritual puede incluir “ser atacado mentalmente con mentiras y exageraciones de las fuerzas de la oscuridad, y cuando tenemos la guardia baja y caemos en las mentiras o exageraciones, le permite al enemigo desarrollar estas mentalidades poco saludables que afectan nuestro estilo de vida y afectan nuestras decisiones”.

Según 2 Corintios 10, “Las armas con que luchamos no son del mundo, sino que tienen el poder divino para derribar fortalezas. Destruimos argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevamos cautivo todo pensamiento para que se someta a Cristo” (v.4-5).

“Algunos eruditos creen que [Pablo] tomó esa palabra fortaleza de la fortaleza que estaba en medio de la ciudad de Corinto, y usó esa imagen para pintar ese cuadro de lo que es una fortaleza”, dijo Brian.

Proclamando la libertad

En Lucas 4:18, Jesús leyó del libro de Isaías: “El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para anunciar buenas nuevas a los pobres. Me ha enviado a proclamar libertad a los cautivos y dar vista a los ciegos, a poner en libertad a los oprimidos”.

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«El Señor comenzó simplemente, a través de estos encuentros y experiencias, a enseñarme y capacitarme». – Laura Warth

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Citando ese versículo, Laura dijo: “Primero que nada, yo quiero animarnos a saber que esto es lo que Dios vino a hacer y luego a equiparnos. Básicamente tuve entrenamiento mientras caminaba. Fue un entrenamiento práctico. El Señor comenzó simplemente, a través de estos encuentros y experiencias, a enseñarme y capacitarme, porque en ese momento no sabía a dónde ir”.

Ella estudió lo que dice la Biblia acerca de Jesús sanando a las personas y liberándolas de la opresión demoníaca. Luego se sumergió en otros libros y capacitación.

¿Orar u ordenar?

Heintzman preguntó a los Warth sobre la “diferencia entre ordenar, tomar autoridad en el nombre de Jesús, y hacer oraciones de súplica por algo, y ¿cómo discernir cuándo usar esas herramientas y cómo usarlas?”

Laura dijo que cuando ella “pide al Espíritu Santo que venga e impregne este lugar, este espacio, esta atmósfera con Su presencia, Su poder, Su paz; Estoy hablando con el Señor, y es una petición directa, estoy orando”. Sin embargo, durante la guerra espiritual, “cuando estoy ordenando espíritus de miedo o cualquier otra cosa que se haya adherido o haya puesto a esta persona en cautiverio, entonces paso al modo de comando, y eso es diferente. Yo nunca ordeno al Señor. Eso no es oración. Los demonios los mando porque la Biblia dice que se nos ha dado autoridad sobre ellos, y por eso es importante entender la diferencia entre ordenar y orar”.

Manifestación demoníaca

Cuando se le preguntó si los demonios se habían manifestado alguna vez a través de personas en la iglesia, Brian dijo que durante la “última noche de liberación” de la Capilla del Cambio, había una multitud de personas en el altar, y algunas se estaban manifestando. Algunos estaban gritando. Algunos venían contorsionándose, y nosotros solo luchábamos en la fe”.

En otra ocasión, en el altar de la Capilla del Cambio, una mujer recibió la oración de otro pastor y luego de la pastora Laura.

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«… no hubo miedo, porque Dios nos había dado autoridad». – Laura Warth

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“Recuerdo el momento en que tomé sus manos y cerré los ojos. Empecé a orar por ella”, recordó Laura. “Casi al instante, comencé a escucharla soltar estas palabras que decían: ‘No puedes tenerla. Ella nos pertenece. Ella fue sacrificada por nosotros. Somos dueños de ella’”.

Laura consideró si la mujer estaba bajo la influencia de algo y luego, debido a su investigación sobre la guerra espiritual, se dio cuenta de lo que estaba pasando.

“Por la gracia de Dios, terminamos ministrándola esa noche”, dijo Laura. “Esta fue una de esas situaciones que fue muy radical, pero gracias a Dios que no hubo miedo, porque Dios nos había dado autoridad. Entonces, cuando entramos en eso, vimos que este demonio se fue. Ella solo suspiró, respiró hondo, miró hacia arriba y siguió diciendo: ‘Me siento tan ligera. Me siento tan ligera’”.

Haz clic aquí para ver la conversación completa en el “Podcast Luz y Vida”.

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