Mantenerse arraigado en un mundo que cambia rápidamente

Por Sarah Vessely

¿Tienes una festividad o una tradición favorita que tu familia hace cada año durante las fiestas?

Al crecer, las tradiciones eran muy importantes para mi familia (y todavía lo son hoy). Una de estas tradiciones continuas es hornear galletas de azúcar en Nochebuena. Una lección importante que mis padres nos enseñaron a mis hermanos y a mí cuando éramos más jóvenes fue: aunque crezcas, no tienes que superar las tradiciones o la familia. Es por eso por lo que todavía horneamos galletas de azúcar cada año. También vamos a la casa de mi abuela y papá para hornear galletas con nuestra familia extendida.

A medida que llegaba la Navidad de este año, no pude evitar notar las similitudes de Jesús y hornear galletas. Sé que esto suena loco. Confía en mí y sigue leyendo para descubrir a qué me refiero.

Cada año, la gente va a la tienda con una lista, basada en las galletas que quieren hornear. Después de elegir los ingredientes, se van a casa, comienzan a hornear, limpian los desórdenes a medida que avanzan y hacen su propia creación. Esto es similar a cómo Jesús es con cada uno de nosotros.

Jesucristo te elige de todas las opciones que hay (Juan 15:16). Jesús te da diferentes ingredientes que Él sabe que son los mejores. Jesús te ayuda cuando hay líos. Finalmente, Jesús te hace Su propia creación (2 Corintios 5:17). ¡Qué bendición es esa! ¿Verdad?

Jesús te escogió para ser Suyo.

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«Tener un fundamento mientras navegamos por la vida en diferentes etapas nos ayuda a mantenernos en el camino que Jesús quiere que sigamos».

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Amor + Luz en un Mundo Loco

Este mundo en el que vivimos hoy puede ser una locura y cambia a un ritmo rápido. Una cosa en el mundo y en nuestras vidas que no cambia es Jesús y su amor por nosotros. Es muy importante que recordemos esto, porque vemos a Jesús obrando en la vida de las personas a nuestro alrededor.

Puede ser muy fácil mirar a tus vecinos y señalar todo lo que ellos tienen que tú no, pero si todos hacemos eso, tendríamos dedos apuntándonos. Dentro de este mundo, necesitamos tener confianza en quiénes somos y en quiénes Jesús dice que somos. Mateo 5:14 dice: “Ustedes son la luz del mundo”.

¿Cómo podemos aplicar eso a nuestras propias vidas individuales?

En lo que sea que hagas en la vida, ya sea trabajo, crianza de los hijos, amistades o relaciones, sé la luz del mundo. Ama a todos, ora por todos (incluyéndote a ti mismo), da a los demás, perdona a los demás (y a ti mismo) y haz lo mejor que puedas para vivir cada día como la mejor versión de ti mismo. La felicidad es contagiosa. Extiéndelo a donde quiera que vayas. Independientemente de lo que estés llamado a hacer como carrera, toma estas cinco acciones dondequiera que vayas en la vida.

Estas acciones también pueden servir como una base para donde te encuentras actualmente en la vida, al mismo tiempo que te ayudarán a medida que envejeces y atraviesas nuevos hitos y etapas, como tener hijos mayores, convertirte en abuelo o jubilarte.

Tener un fundamento mientras navegamos por la vida en diferentes etapas nos ayuda a mantenernos en el camino que Jesús quiere que sigamos. Cuando comiences a vivir tu vida con este fundamento, verás de primera mano cómo Jesús está contigo y te hace Su propia creación.

Conectado a tierra + Enraizado

¿Por qué debemos llevar esta verdad con nosotros a lo largo de la vida?

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«Nunca es demasiado tarde para comenzar algo».

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Como todo en la vida cambia tan rápido, es importante que permanezcamos cimentados en Cristo. Las cosas nos pueden ser arrebatadas en cualquier segundo del día, lo cual es una de las principales razones por las que es tan importante permanecer arraigado en Jesús. Cuando estos cambios suceden en la vida, ciertamente no serán fáciles solo porque sigues a Jesús. Seguirán siendo igual de difíciles, pero no tendrás que cargarlo todo tú solo.

Las bendiciones que tenemos hoy podrían desaparecer mañana, y una vez que esa realidad comience a establecerse, comenzarás a ver por qué es tan importante tener a Jesús a tu lado.

Hace poco vi un video de una pareja que había estado casada durante 60 años bautizándose juntos, y se me saltaron las lágrimas al ver cómo la paz los bañaba al salir del agua, limpios, puros y juntos. Esto me enseñó una lección importante: nunca es demasiado tarde para comenzar algo.

Ahora, no conozco los antecedentes de esta pareja, ni de su vida. Lo que sí sé es una cosa. Jesús siempre está dispuesto a acogerte. Puedes comenzar con una simple oración o asistir a un servicio de la iglesia. Prepárate para ver cómo Jesús transforma tu vida. Comienza tus propias tradiciones y crea tus propios recuerdos hoy.

Recuerda en esta temporada navideña que Jesús te ama. ¡Felices fiestas!

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